¿De qué forma encontrar y seleccionar el correcto distribuidor para mi producto?
Un distribuidor de producto es una parte importantísima para una empresa comercial y de ventas. Es uno de los motores que mantendrá a la empresa en pie.
Encontrar al perfecto distribuidor puede ser no tan sencillo como se espera, pero es un proceso que toma su tiempo y debe ser llevado con paciencia y precisión. Estos 6 pasos son clave para que el proceso se lleve a cabo correctamente y encontrar al distribuidor no se vuelva un dolor de cabeza:
Revisar opciones. Es importante buscar en muchas fuentes de información, tanto internet como directorios y revistas comerciales, incluso consultar con empresas de giros similares y pedir referencias. Construir un amplio menú de candidatos incrementa las posibilidades de encontrar al idóneo para la compañía.
Crear un perfil. Enumerar todos los detalles relevantes que el distribuidor ideal debería tener. Por ejemplo: puntualidad, tiempos de entrega al cliente, confiabilidad, etc., por mencionar algunos. Entre más específico sea el perfil, más sencillo será encontrarlo.
Clasificar. Después de crear el perfil, se tiene una idea más clara de lo requerido. Pueden enviarse correos o realizar llamadas a los que se considere más apropiados e ir descartando poco a poco a aquellos que no cumplan con el perfil. Parece tedioso, pero es necesario para asegurar que el proveedor sea el indicado.
Realizar una entrevista. Encontrarse con algún directivo o encargado de cada una de las empresas seleccionadas (o con el o los independientes) y realizar las preguntas que se consideren más relevantes y que no hayan sido preguntadas en el punto anterior (clasificar) o que aún se tenga duda: marcas para las que trabajan, años en el mercado, estructura de distribución y ventas, volúmenes anuales de venta, estrategias de publicidad, entre otras. De hecho, ninguna pregunta sale sobrando.
Evaluación. Comparar cada uno de los distribuidores en cuanto al perfil creado anteriormente. Esto se hace con tiempo, sin presiones y analizando fríamente cada prospecto.
Pedir referencias. Finalmente, preseleccionados los posibles distribuidores, es necesario realizar las llamadas a sus clientes y ex clientes para pedir referencias. Otra opción puede ser checar en su sitio web y en sus redes sociales.
Cabe destacar que los distribuidores pueden buscarse como independientes o compañías que se dediquen específicamente a la distribución de productos.
Tanto empresas como particulares se encuentran fácilmente por internet en páginas web o colocando anuncios en redes sociales. No es un proceso difícil y suele ser bastante efectivo.
¿Cuáles son las ventajas y desventajas de las reuniones empresariales?
Las reuniones empresariales pueden resultar la mejor decisión que pudo haber tomado una compañía o como el peor fracaso a nivel organizacional interno.
Depende de la forma en que se maneje y la profesionalidad con la que se lleve a cabo puede convertirse en un arma de doble filo. A continuación se detallan sus pros y sus contras:
Lo bueno:
Comunicación bidireccional. Las reuniones empresariales conectan al empleado con la dirección o la gerencia. Permiten que la comunicación se centre en ambos lados, se discute y se llega a acuerdos comunes. Además se plantean problemas generales y se aportan ideas para solucionarlos. Generan bastante retroalimentación y si se hacen correctamente, el resultado es muy prometedor para la compañía.
Planeación y estrategias. Se tratan asuntos importantes que involucran a diferentes áreas de la empresa, por ejemplo: la producción, la publicidad, la productividad, ventas, compras, los planes y objetivos, entre otros. Siempre que la reunión se encuentre bien planificada y sea presidida por la persona que asume el control general del negocio, es una excelente forma de organizar al personal y de dirigir y planear tácticas efectivas.
Aportación y recepción de información. Finalmente, la información que se aporta y se recaba en su totalidad, es muy sustancial y beneficiosa sobre todo al corto plazo. Es necesario que se lleve registro de todo lo acordado en la junta para que su control y medición sea más sencillo.
Lo malo:
Suelen alargarse más de la cuenta. Eso siempre sucede cuando no se ha planificado correctamente. Los tiempos del personal y de los directivos son importantes y las juntas no pueden quedarse a medias. Dejan asuntos importantes sin resolverse, muchas veces la atención a clientes entre ellas, únicamente por no lleva a cabo una administración del tiempo apropiada.
Se vuelven tediosas y aburridas. El directivo se expande demasiado en sus explicaciones sin llegar a puntos concretos y hace tremendamente aburrida la reunión. Cuando eso pasa regularmente nadie presta atención y surge un sentimiento de desgano y de haber desperdiciado tiempo valioso.
Falta de planificación. Y esta vez no únicamente en cuanto al tiempo, sino también al orden y estructura de la junta (puntos a tratar por nivel de relevancia, personas convocadas, persona que presidirá la junta, etc.), al lugar, la fecha y la hora de inicio y término exacta.
Lo peor:
Baja la productividad. Debido al paro de actividades “gracias a la reunión”. Mucho peor si la junta resulta absolutamente improductiva o se perdió mucho tiempo en ella.
No se lograron acuerdos ni mejoras. Es decir, no se llegó a nada. Todo fue en vano y se perdió tiempo, dinero, esfuerzo, además de enojo y frustración de todos los involucrados.
Hacerla obligatoria para personas ajenas. Ocurre cuando se obliga a estar presente en la reunión a personas que no tienen nada que ver con los temas que se trata en la reunión. No tiene sentido, distrae y hace perder el tiempo a esas personas ajenas a este tema específico de la reunión.
¿Cuándo es el momento para contratar nuevo personal?
Contratar nuevo personal siempre resulta muy exhaustivo para el ejecutivo de Recursos Humanos, no solo por el trabajo que representa, sino por la responsabilidad de cubrir un puesto con la persona idónea. Muchas veces, sin embargo, puede ser innecesaria la búsqueda porque la empresa no lo amerita, o viceversa, es necesario contratar nuevo personal y el ejecutivo de R.H. no estaba enterado.
Para que no se compliquen más ese tipo de situaciones, se muestran a continuación varias situaciones en las que sin duda se amerita de nuevo personal:
La demanda ha aumentado. Cuando el número de clientes aumenta significativamente y se mantiene a lo largo del tiempo, es momento de comenzar a pensar en contratar nuevo personal que se haga cargo, sobre todo, de la atención al cliente y la producción. Este hecho significa que existe la posibilidad de un crecimiento en la empresa y no es adecuado permitir que los clientes se vayan por falta de personal, se debe asumir el riesgo y afrontar el crecimiento.
Los empleados con los que se cuentan no son suficientes o están trabajando de más. Si un solo trabajador realiza las actividades que deberían llevar a cabo dos o más colaboradores, o algún área de la empresa se para constantemente por falta de personal, significa que las actividades son demasiadas y el personal muy escaso. No debe permitirse que los empleados afronten demasiadas actividades porque esto perjudica la productividad y desarrolla descontento.
Se requiere personal temporal para un área en específico. Por ejemplo, si se va a lanzar una nueva campaña o un nuevo producto al mercado.
El tiempo ya no es suficiente. Cuando el directivo, así como los empleados, ya no cuentan con tiempo suficiente para concluir las tareas, cuando se pasan más horas en el trabajo que con la familia porque no se da basto, es hora de contratar más personal; las tareas son excesivas y ya no alcanza con la mano de obra con la que se cuenta.
Desarrollo de nuevo producto o proyecto. Desarrollar un nuevo proyecto no es sencillo, requiere de personal capacitado en ciertas áreas y, sobre todo, gente preparada para asumir el control de dicha responsabilidad. En ocasiones se cuenta con el personal apropiado, pero dejan descuidadas sus actividades cotidianas regulares.
a. Lo más factible es contratar personal (puede ser temporal o no, depende de las necesidades de la empresa y del desempeño profesional) capacitado y con tiempo disponible para tomar el control.
Personal para abrir una nueva área. Si la empresa va en crecimiento y se requiere la inauguración de nuevas áreas, es no solo importante sino necesario, contratar nuevo personal experto en esa materia.
a. Las empresas buscan capacitar a los empleados ya existentes para ahorrar en gastos, pero no siempre es lo más apropiado porque dejan gritas en sus áreas anteriores. Así que lo más recomendable es buscar al nuevo colaborador que cumpla con los requerimientos del nuevo puesto.
Supervisión o atención de personal y/o sucursales. Es una situación similar a la anterior. Antes de capacitar al personal con el que ya se cuenta, es necesario preguntarse y poner en una balanza si el beneficio es mayor que el perjuicio, si no es así, es momento de pensar en contratar nuevo personal.
¿Cómo puedes contratar personal efectivo?
Si bien nadie tiene la llave que abra las puertas del cofre mágico donde se consiguen excelentes empleados, es importante que las compañías comiencen a ver al empleado más allá que un simple recurso que genera dinero. Tienen que pensar en el trabajador como una parte esencial y fundamental para el éxito organizacional. Empecemos analizando estos 7 consejos básicos:
1. NO contrate a alguien que piense como usted. Un equipo de trabajo debe ser diverso.
No contrate clones suyos. Contrate personal con pensamiento crítico propio, con ideas interesantes bien fundamentadas que en cierto momento servirán como reto para el equipo y para usted y generarán conflicto. El conflicto es saludable cuando lleva a ideas que no se habían pensado antes.
2. Habilidad más que currículum.
Un excelente currículum impresiona, pero no demuestra concretamente habilidades. Una charla larga y un par de pruebas de talento cortas muchas veces dicen más de la persona que un currículum de 20 páginas.
Busque mentes diferentes y creativas. Las resoluciones a los
problemas organizacionales muchas veces son resueltas por personas que “piensan fuera de la caja”. Personas ordinarias existen muchas, personas diferentes son muy pocas.
4. Cubra los huecos que deben ser cubiertos.
Conozca las debilidades y las áreas de oportunidad que existen en su equipo de trabajo y trate de cubrirlas con nuevo personal. Si dentro de la organización necesita personal que maneje idiomas, por ejemplo, enfoque sus esfuerzos en conseguirlo.
5. Busque a alguien curioso.
Una persona curiosa es muy valiosa. Busca aprendizaje constante y regularmente es creativa. El hambre por el conocimiento que tienen las personas curiosas, es necesario para que la empresa evolucione y aprenda, compita y rompa paradigmas convencionales.
Las empresas necesitan candidatos con genuina pasión por el trabajo, deseos de superación visibles, con ética y moral bien definidas, que comparta los valores de la empresa, con capacidad de aprendizaje continuo, capacidad para resolver conflictos, que se rete a sí mismo, constante y comprometido en todo momento y con hambre de crecimiento.
7. Diga NO a una entrevista ordinaria.
Una entrevista donde el candidato hable sobre sus logros, sus trabajos anteriores, sus conocimientos teóricos y donde se le hagan constantemente las mismas preguntas, realmente no dice mucho del prospecto. En una entrevista ordinaria lo único que se puede esperar del candidato es que sea ordinario. Las empresas deben enfocar sus esfuerzos en contratar personas que además de tener conocimientos, sean extraordinarias. No simplemente intelectualmente extraordinarias, sino, con pensamientos diferentes.
Como se dijo anteriormente, con pensamiento crítico y creativo, que rompa esquemas y paradigmas, que se adapte al cambio y, más que eso, que sea él mismo un agente de cambio. Ese es el tipo de trabajador que requieren actualmente las empresas porque el mundo evoluciona constantemente y así mismo las empresas tienen que aprender a evolucionar. No es necesario contratar robots que reciban órdenes, es necesario contratar seres humanos que superen sus propios límites todos los días.
El recurso humano es el activo principal de toda organización. No obstante, muchas empresas no saben cómo retener a esos empleados que resultan excelentes y que han aportado mucho valor a la empresa e incluso a la marca.
Aquí se presentan algunas maneras clave muy efectivas para retenerlos antes de que siquiera se planteen el hecho de querer renunciar:
Liderazgo efectivo. Ser líder no es lo mismo que ser jefe. Mientras el jefe ordena y regaña, el líder orienta y motiva. El maltrato de un jefe es una de las causas principales por las que el empleado decide retirarse de la organización. Por lo tanto, como directivo o ejecutivo de alta jerarquía debe buscarse el liderazgo y pensar en el buen trabajador como un recurso importante que agrega mucho valor al negocio.
Capacitación constante. Para que un excelente empleado no quiera irse nunca, es necesario que se sienta valorado y que sienta que está creciendo como profesional y dentro de la compañía. Resulta un error fatal el hecho de que las empresas no invierten en capacitar a los trabajadores adecuadamente, a la larga puede ser mucho más costoso el tener que contratar nuevos empleados por rotación o por retiros.
Realizar encuestas de satisfacción. Es importante que se reconozcan las necesidades del trabajador, y mediante encuestas quincenales o mensuales puede medirse el nivel de “felicidad” del trabajador que le interesa a la compañía retener para poder trabajar posteriormente en ese aspecto con él.
Cultivar las relaciones interpersonales. Lograr que se genere un buen ambiente entre todo el personal borrará la idea de los empleados de querer irse. Está comprobado que las relaciones amenas entre compañeros sostienen una fuerte influencia en las decisiones de permanencia o retiro del trabajador.
Desarrollo de proyectos propios. Los adultos jóvenes, también conocidos como “millennials”, son la nueva generación de empleados. Su pensamiento se centra en la libertad y la propiedad, ser propietarios de su negocio. Los millennials no buscan ser fieles a una empresa, buscan construir un futuro emprendiendo.
a. Por ello, la empresa puede impulsarlos, sin descuidar su trabajo, a que lleven a cabos sus proyectos. De hecho, pueden organizarse juntas periódicas con información relevante para los interesados en emprendimiento y pueden establecerse algunos bonos extras como incentivo por lograr ciertos objetivos o por puntualidad y asistencia.
b. Por otra parte, existen empleados que ya han decidido renunciar por diversas razones y que la empresa no puede permitirse perder por la excelencia de su trabajo y el valor que aportan a la compañía. Si ese es el caso, estas estrategias pueden utilizarse para retenerlo:
Escuchar atentamente. Parece que no importa, pero la escucha activa hacia el empleado puede permitir al directivo comprender exactamente lo que está pasando con el trabajador para tratar de remediar la situación y llegar a acuerdos concienzudos y efectivos para ambas partes. Muchas veces el problema principal no es tan grave que no pueda solucionarse únicamente escuchando con empatía.
Ajuste salarial. A veces el empleado no se siente lo suficientemente bien recompensado monetariamente de acuerdo al trabajo que desempeña. Por eso el punto anterior resulta tan relevante, es posible que hablando con él pueda acordarse una suma en donde nadie pierda y el colaborador quede contento y listo para quedarse durante mucho tiempo.
a. En este sentido, también puede tomarse en cuenta la posibilidad de redituar extra al empleado con comisiones por productividad, por ejemplo, pero esto depende mucho del puesto que desempeñe. Primeramente habría que hablarlo con el empleado y evaluar si le es factible y suficiente para quedarse.
Flexibilidad. El empleado es un ser humano, sus necesidades son importantes y deben ser satisfechas en la medida de lo posible. En algunas ocasiones el problema principal es que el horario es muy ajustado o trabaja demasiadas horas extras y no le queda tiempo libre para su esparcimiento y la convivencia con sus seres queridos. Una conversación bilateral puede proporcionarle al empleado ese respiro que tanto necesita.
Reconocimiento y gratificaciones. Si el trabajador no se siente apreciado y reconocido lo más probable es que quiera alejarse hacia algún lugar donde sea valorado. Reconocer su trabajo y gratificar su esfuerzo monetariamente es un comienzo.
a. De todas formas, no siempre es dinero lo que se busca, sino incentivos más personales; por ejemplo: reconocimientos públicos por escrito, apoyo para crecimiento profesional (pueden ser cursos y diplomados), ascensos en la escala jerárquica, días libres por excelente productividad, etc.
Cambio de ambiente. Puede ser un cambio de sucursal, un cambio de puesto, un ascenso y la preocupación y logro de una mejora en el clima organizacional (si esto resulta necesario).
¿Cuáles son las mejores estrategias para ofrecer promociones y descuentos?
Las empresas han tenido la loca idea de que ofrecer promocionar y descuentos a productos o servicios requiere de mucho esfuerzo y dinero. Si bien, es necesario el esfuerzo de marketing en cuanto a segmentación de mercado y a publicidad (campaña publicitaria), si sabe realizarse correctamente es más fácil, rápido y económico de lo que se piensa.
Siguiendo estas 8 estrategias el proceso será más efectivo:
Promoción en redes sociales. Básico y muy importante. Mantener activos los perfiles en los que la empresa esté presente es clave. Se tiene que presentar la información detallada de lo que se ofrece y estar muy pendiente de la retroalimentación del internauta.
a. Las campañas de marketing en cada red social son muy efectivas y económicas. Si no se conoce mucho sobre el tema online, lo más recomendable es contratar a alguien con conocimientos que mantenga al tanto al directivo de todas las métricas de cada red social.
Muestras gratuitas. También es un clásico que no falla. Puede solicitarse permiso en plazas o centros comerciales, escuelas, oficinas (incluso afuera del propio local) y regalar muestras del producto.
a. Este procedimiento puede ser más sofisticado si se congrega a los clientes más importantes y se realiza una reunión especial fuera de la empresa para ofrecer el producto junto con la conveniente promoción y descuento, aunque esta estrategia resulta más costosa y depende bastante del giro o tipo de producto (por ejemplo, puede funcionar bastante bien para un restaurante o una perfumería).
Email marketing. Se centra en enviar boletines a los posibles clientes con toda la información sobre nuevas promociones, descuentos y cualquier novedad que se tenga. De hecho, también es bastante factible enviar cupones de descuentos a los clientes más fieles y pequeñas promociones para aquellos posibles nuevos clientes.
Repartir cupones uno a uno. Es decir, cambaceo. Es una forma un tanto primitiva y ciertamente no tan efectiva como las anteriores, pero podría llegar a funcionar. Los cupones pueden ser impresos en blanco y negro para que no sea tan costoso y se llevaría a cabo únicamente mientras dure la promoción o el descuento.
Alianzas con otros negocios. Buscar alianzas con empresas que sean compatibles con el giro de la compañía, nunca con la competencia. Pueden imprimirse boletines o cupones de descuento que el aliado estratégico entregaría cada vez que alguien entre a su local y viceversa.
Poner en marcha un concurso. Empezar un concurso donde el (o los) premio (s) sea un producto propio. La convocatoria y las bases pueden anunciarse en las redes sociales, mediante campañas online y offline (medios tradicionales) y por email marketing: además pueden existir premios de consolación como cierta cantidad de cupones de descuento.
Contactar con bloggers y youtubers. Realmente este punto es un poco más complicado que los demás. Se trata de conseguir influencers, es decir, personas con suficiente influencia y tráfico en sus sitios web o redes sociales, para que muestren y promocionen los productos.
8. Publicarse en un directorio de descuentos. Se puede buscar en un sitio de comparación de productos dónde se publican los descuentos que podemos ofrecer. Un ejemplo de esto es la página de descuentos de softwares y comparaciones entre los diferentes programas.
Contactar a esa persona puede ser algo exhaustivo, depende del influencer si cobra o no por anunciar (en efectivo o en especie) y habría que acordar las condiciones de los descuentos con él/ella. Es complicado, pero dependiendo del público meta de la empresa y del influencer, puede ser muy redituable y beneficioso para ambas partes.
Comunicación efectiva. Permite incorporar imágenes, textos y videos. Conecta a los usuarios con el contenido empresarial y los acerca para que interactúen y conozcan los planes organizacionales y lo que la organización tiene para ofrecerles. También es posible otorgar una respuesta inmediata gracias a los mensajes automáticos, o entablar conversaciones por medio de un chat interno.
Retroalimentación sencilla e inmediata. Gracias a la interacción certera, constante y en tiempo real, los comentarios de los posibles clientes se vuelven bastante útiles y se hace posible un trato personalizado y exclusivo con la audiencia. También permite saber qué piensan los clientes y resolver dudas.
Agrega valor. Genera confianza, ya que el cliente siente más cercanía y empatía con la empresa. Además puede ser una fuente diferenciable de la competencia.
Bajo costo. Existe la posibilidad de crear blogs completamente gratuitos o, puede crearse un blog a muy bajo costo, que, la gran mayoría de las veces cobra por el servicio anualmente. En muchos casos se puede implementar la versión gratuita ya que existen blogs muy populares y efectivos que pueden funcionar como WordPress y Blogspot.
Fidelización de clientes. Se pueden atraer clientes fácilmente gracias a las estrategias de posicionamiento SEO y es posible fidelizarlos con contenido atrayente y por medio de suscripciones completamente gratuitas.
Fuente de obtención de prospectos. Por medio de un blog se puede acceder a nuevos prospectos, ya que pueden ofrecerse obsequios de valor a cambio de suscripciones, por ejemplo: guías, ebooks y pruebas gratis del producto o servicio que se ofrece.
Verificación de métricas. Las métricas de tráfico son totalmente visibles para los dueños del blog, no es complicado acceder a ellas e indican aspectos importantes de los usuarios como: localización, fuente de la visita, número de visitas diarias, entre otras; lo cual simplifica el conocimiento de los alcances de las publicaciones y su relevancia para los usuarios.
Es posible generar acciones comerciales. Por medio de estrategias y alianzas con otras empresas del mismo giro o similar, o con empresas que se dediquen a la publicidad; se trata de generar tratos donde ambas partes ganen por igual. También pueden generarse acciones comerciales con clientes suscritos y fieles a la compañía que les generen valor agregado (por ejemplo premios o descuentos).
Puede convertir a la empresa en referente. Un contenido bien pensado y creado a base de estrategias puede convertir a la compañía en un referente en su rubro y potencializar al máximo su reconocimiento, tanto en la red, como fuera de ella.
Razones para que la empresa esté en Internet
El internet ha revolucionado la manera de hacer negocios por parte de las empresas, pues aprovechan la forma de interactuar y comunicarse de los usuarios. Según la Unión Internacional de Telecomunicaciones, el 43% de la población mundial (3.300 millones) están conectadas a internet, por otra parte, el INEGI señala que 57.4% de la población en México si utiliza internet, de ello se desprende que el 88.7% lo usa para obtener información.
Por estas razones, es muy importante que las empresas tengan presencia en internet, y para aprovechar al máximo esta parte, se deben de cumplir una serie de objetivos que permitan ofrecer servicios concretos, acercarse e interactuar con el cliente o encontrar nuevos, así como mejorar la producción y el funcionamiento general de la empresa. A continuación, se presentan algunas de las razones para llevar tu negocio al mundo digital.
Importancia de tener presencia en internet
Valorar al cliente: El consumidor es la fuente primaria de energía para la supervivencia de cualquier empresa. una página web bien diseñada y administra se convierte en un canal para dar un mejor servicio al cliente, debido a que la interactividad en internet ayuda a crear mayor afinidad y complicidad entre los usuarios visitantes, lo cual sería imposible a través de otros medios; si se hace bien, puede marcar la diferencia frente a la competencia y convertirse en un valor agregado.
Mejorar la comunicación: las empresas subsisten gracias a que han creado una entramada y compleja comunicación entre las distintas partes que conforman la organización. La automatización actual de las organizaciones con su entorno interno y externo permite llegar con mensajes precisos y adecuados en función del nivel profesional o el interés puntual de la audiencia.
Mensajes instantáneos: La inmediatez con la que se transfiere la información permite a las empresas que tienen un sitio web estar disponibles las 24 horas del día y los siete días de la semana, debido a que la interacción se puede dar en tiempo real entre los distintos departamentos, lo que es un factor clave al momento de dar una respuesta concreta al cliente, que se traduce en comentarios, pedidos o múltiples acciones para satisfacer sus necesidades y expectativas.
Clientes potenciales: cada vez los productos tienen mayor demanda, por lo cual la producción, distribución y presentación de los mismos deben de estar disponibles en el menor tiempo posible, con la finalidad de que el cliente se sienta satisfecho en su demanda.
Reducción de costos: Las empresas utilizan el internet para dar a conocer sus productos y servicios, siendo muy importante para la empresa y el consumidor, porque la automatización de marketing y distribución se traduce en ahorros muy importantes para la empresa.
Mejora de la productividad: La implementación del internet al interior de las empresas ha ayudado a mejorar diversos procedimientos relacionados con la administración de las organizaciones, la disponibilidad de los recursos humanos, y el acceso y gestión de la información desde cualquier lugar, así como en el control y la descentralización de dichos procesos.
Nuevos horizontes: Las empresas que están conectadas en internet tienen mejores posibilidades de presentar sus productos en cualquier lugar del mundo, lo que permite abrirse a nuevos mercados y clientes; Hay soluciones de e-commerce fáciles de implementar, y empresas de logística que pueden llevar tu producto a cualquier lugar del mundo. “Hay que prever la forma de satisfacer la demanda de estos clientes y canalizarla adecuadamente“, como indica Josep García, director de Ylos.com.
Nuevos negocios: La interrelación con los clientes qué se genera con el uso de la web crea nuevas oportunidades y nuevas ideas, facilitando un desarrollo más ágil y dinámico, teniendo nuevas líneas de productos en fases tempranas del desarrollo.
Facilita el marketing: Con una página web se crean mejores estrategias de marketing digital. Con un pequeño financiamiento de inversión en tecnologías de la información se abre nuevos caminos que permiten informar a miles de personas sobre los productos y servicios de la empresa, esto sería muy costoso si se hiciera a través de la prensa escrita o de comerciales de televisión.
Competitividad: La capacidad para competir es una razón fundamental e importante para estar en la internet. la competencia está en línea y si tú no lo estás, vas un paso atrás, perdiendo credibilidad, clientes y reputación.
Consejos para vender por internet
Vender por internet es más que tener un sitio web activo, se requiere una serie de herramientas y estrategias para impulsar las ventas y dar a conocer los productos o servicios, siendo necesario que el empresario tenga una visión de a dónde quiere llegar y qué quiere hacer con la página. La penetración de Internet en México creció 3% superando así los 30 millones de usuarios, en cuanto a las compras por Internet, 12% de los usuarios compra productos a través de este medio, ello según el estudio realizado por Tecnológico de Monterrey, Campus Estado de México. Para que tengas una venta efectiva sigue las recomendaciones que se presentan en este artículo.
Ser de los primeros
Antes de empezar a vender por internet, es necesario dimensionar la gran importancia que esto tiene en nuestras vidas, entendiendo el momento histórico que se vive. el internet es una enorme ventaja al requerir un nivel de inversión menor cuando se pretende vender por internet, que cuando se monta un negocio físico. En América Latina las ventas por internet son un fenómeno relativamente nuevo, por ello, se debe de aprovechar este factor y ser de los primeros en empezar a vender por internet, asegurando un espacio ante la competencia, ya que a medida que pase el tiempo esta será mayor.
No tener miedo a equivocarse
Muchas veces se titubea al momento de tomar decisiones, debido al temor a cometer errores, pero esto debe dejarse de lado y verlo de manera positiva, porque una de las grandes ventajas que trae internet es que hacer pruebas y equivocarse es mucho más barato hasta encontrar la fórmula correcta y ahora sí empezar a invertir cantidades más grandes. Además, muchas de las personas que más venden por internet lo lograron después de varios intentos.
De lo micro a lo macro
Uno de los errores más comunes que las personas cometen cuando incursionan en el negocio de vender por internet, es al momento de enfocarse en lo grande, pues suelen creer que en algunos días obtendrán el éxito deseado, frustrándose y pasando por alto diversas etapas previas, que, aunque son pequeñas, son vitales para el futuro del negocio. se debe de recordar que las personas exitosas empezaron vendiendo en pequeña escala, enfocándose en realizar venta por venta, para después multiplicarlo y vender en gran escala.
Conocer a los clientes
Para vender por internet se deben tomar en cuenta diversos aspectos, entre los más importantes se encuentra saber a quién le estamos hablando, ponerse en sus zapatos, saber qué es aquello que le quita el sueño y qué solución están buscando que tú podrías ofrecerles.
Atraer a los clientes
Atraer a los clientes no siempre es una tarea fácil, y menos cuando se trata de vender por internet, antes de ello, se requiere tener muy en claro cuál será la audiencia objetivo, qué necesidades tienen y las soluciones que están buscando, una vez que se tenga todo ello, es el momento perfecto de darles algo gratuito muy valioso a cambio de sus datos, de esta manera se crea una buena impresión entre los posibles clientes, siendo más fácil hacerles una oferta.
Creando una relación
La fidelización de los clientes depende de la buena relación y comunicación que la empresa tenga con este, para lograrlo se debe construir una interacción con los prospectos antes de presentarles una oferta, primero es necesario ganarse su confianza, atendiendo cada una de sus necesidades y dudas, esto les permitirá sentirse valorados y escuchados.
Una buena oferta
Las ofertas son muy importantes cuando se quiere ser exitoso al momento de vender en internet, se debe emplear una buena estrategia para atraer al cliente al artículo que se está ofertando. entre las estrategias que se pueden implementar una vez que el prospecto es el adecuado y nos tiene la confianza deseada, se encuentra la llamada “técnica de la escasez”, es decir, que haya una consecuencia si no toman acción en las próximas horas o días. Si un prospecto no te compró, recuerda seguir aportándole valor, ya que puede ser que más adelante se vuelva tu cliente.
¿Cuáles son las principales cualidades que debe tener un Director Ejecutivo?
Un cargo tan importante como lo es el director ejecutivo no debe ser tomado a la ligera. No es, en absoluto, un puesto cualquiera qué acatar, representa mucha responsabilidad y una gran carga sobre la espalda. Es el cargo que toma las decisiones finales y que hace que la organización siga ciertas políticas y crezca.
Existen ciertas cualidades que representan a un buen director ejecutivo. A continuación se presentan las fundamentales para el cargo:
Ética. La ética profesional es fundamental en el mundo actual, sobre todo en los negocios. Un directivo transparente, íntegro y éticamente correcto, se convierte automáticamente en un ejemplo a seguir, tanto para los colaboradores como para los subordinados y clientes que llegan a conocerlo. Puede llegar a ser un excelente líder y, sin quererlo, refleja una buena imagen de la compañía.
Conocimientos. No únicamente universitarios, sino también empíricos. Que conozca la teoría y la práctica. Un buen directivo cuenta con los conocimientos que su puesto necesita y con la formación requerida en otros cargos. Tiene que encontrarse en constante aprendizaje.
No debe olvidarse que un director ejecutivo que se ha estancado, puede limitar el crecimiento de la compañía y de los empleados.
Empatía y flexibilidad. Es un líder nato. Se preocupa por sus subordinados en todo momento y es lo suficientemente flexible para comprenderlos sin resultar demasiado permisivo. Conoce bien los límites entre ser empático y no tener autoridad.
Capacidad para priorizar. Un director de orquesta bien podría iniciar el concierto con una u otra melodía y el resultado no sería demasiado diferente. Un director ejecutivo tiene la obligación de tomar decisiones y actuar en base a las actividades y necesidades urgentes. Debe ser capaz de centrarse en lo verdaderamente importante (aquello que genera valor) y dejar lo menos relevante para después.
Perspectiva y visión. Es capaz de liderar al equipo empresarial hacia un punto específico donde los objetivos ya han sido estipulados, aclarados y comunicados a todo el personal; en pos de llevarlos a cabo siguiendo un plan de acción establecido.
Superación de expectativas. El buen directivo siempre busca la mejora y la excelencia. Constantemente se supera a sí mismo y no se plantea expectativas tan altas que resulten imposibles, ni tan bajas que sean exageradamente fáciles.
Curiosidad. Este punto se relaciona mucho con el número 3. La curiosidad permite que el directivo se encuentre en constante mejora y en la búsqueda de conocimientos. Pretende conocer las nuevas tecnologías y busca siempre la renovación y la innovación. Posee una mente abierta que puede ser fuente de nuevas y refrescantes ideas.
Buen juicio. Sabe tomar las decisiones correctas en el momento correcto y delega responsabilidades a los mejores. Cuenta con una excelente capacidad crítica y de resolución de conflictos.
Compromiso. Un buen director ejecutivo se compromete con los empleados, con los clientes y con la compañía. Es responsable y asume riesgos.
Disposición para enseñar. Compartir e impartir conocimiento es sumamente importante para un buen líder ejecutivo. Tiene que estar dispuesto a enseñar a sus colaboradores y hacerlos crecer profesionalmente, porque a la par de ellos, la empresa también crece.
Destrezas comunicativas. Una visión clara y los objetivos bien establecidos nunca serán suficientes si el director no sabe cómo comunicarlo a los subordinados. La facilidad de palabra es clave. Cada decisión importante debe ser explicada de forma sencilla y comprensible para todos.
Saber guiar. El directivo debe ser como un mentor que va de la mano con el empleado. La correcta orientación hacia los objetivos específicos y generales, las políticas y los procedimientos deben quedar absolutamente claros. Una pregunta mal atendida puede provocar errores fatales para la empresa posteriormente.
Comunicar con el ejemplo. Es importante que el directivo también cumpla las normas establecidas y que funja como ejemplo para el personal. Ese tipo de acciones son el cimiento que construye poco a poco el respeto.
Escuchar a los empleados. La escucha activa de todo el personal en pleno puede ser la diferencia entre el fracaso o el éxito absoluto. El personal sentirá la confianza de acercarse a comentar cualquier circunstancia que le incomode si se sabe escuchado y comprendido.
Marcar objetivos claros. Los objetivos deben ser claros, concisos, mesurables y alcanzables. El director debe enfocar su trabajo y el de su equipo en lograr los objetivos.
Mano firme. Firmeza en las decisiones, en la resolución de conflictos y en la ejecución de los planes que permitan cumplir los objetivos.
Comprometer al colaborador y comprometerse. El trabajador se compromete si comparte los valores de la compañía y si esta, a su vez, se compromete con él. El rango jerárquico jamás debe ser un pretexto para no cumplir con las obligaciones que su puesto amerite.
Determinación. Para un directivo no existe espacio para la indecisión, una vez tomada una decisión importante, no debe haber marcha atrás.
Motivar e incentivar. Una palmada en el hombro, bono de productividad, una plática relajante con el empleado del mes, fines de semana de deportes con todo el personal… todo ello mantiene unido y motivado al equipo.
Implementar el cambio constante. El mundo evoluciona, la empresa debe evolucionar con él… el cambio siempre es desarrollo. Como dice la famosa frase de Winston Churchill “Mejorar es Cambiar”.
Fomentar el aprendizaje constante. Rotación de personal cada cierto tiempo para que aprendan nuevas técnicas, ascensos cuando es necesario y diplomados en diversas áreas son factores que también determinan el crecimiento de la empresa y del empleado.
Propiciar la creatividad. Para un trabajador no hay nada más duro que sentirse un mueble o un robot. Probablemente haya que comenzar a cuestionarse procedimientos inútiles cuando el empleado realice el trabajo más eficientemente sin la necesidad de utilizarlos. Facilite y permita la innovación.
Trabajo en equipo. Fomentar el trabajo en equipo es ayudar a los empleados a conocerse. La cooperación y la competitividad generan trabajadores seguros y dispuestos a evolucionar profesionalmente.
Atender necesidades individuales. Todos los seres humanos tienen necesidades individuales que necesitan ser atendidas por separado. Cuando un empleado está seguro de que sus necesidades son atendidas trabaja con gusto y deseos de conseguir los objetivos organizacionales porque se siente parte de la organización.
El empleado es el recurso más importante. La mayoría de los puntos anteriores se resumen en el hecho de que el trabajador es el recurso más importante. El directivo debe ser consciente de que la empresa necesita empleados para subsistir y del esfuerzo de ellos depende el éxito o fracaso de la compañía.
Todas las cualidades anteriores son las pautas base de un buen líder. El director que es líder debe enseñar con el ejemplo, debe saber escuchar y aprender de todos. Siempre busca el bien común y trabaja en equipo. A su vez debe de cumplir una serie de funciones de forma general para su puesto de trabajo como se muestra a continuación.
Funciones de un director ejecutivo
Ahora que entiendes que todos los perfiles son necesarios y que todos deben comprometerse con el mismo fin pasemos a revisar las funciones principales del administrador de una empresa.
La planeación
Si se trata de encontrar el mejor plan para alcanzar los objetivos, entonces necesitas en tu negocio a un administrador de empresas.
Aquí la clave es que el profesional pueda estar en un constante monitoreo de las etapas de planeación para detectar las oportunidades o las amenazas y así durante el camino ir realizando las modificaciones correspondientes.
2. La organización
Podemos decir que un administrador de una empresa es quien mueve los hilos porque se encarga de establecer las funciones y responsabilidades para alcanzar las metas establecidas.
3. Dirección
Esta función tiene relación directa con la anterior, ya que un administrador es quien finalmente toma las decisiones para así dar las órdenes e instrucciones para así hacer que todo el proceso se lleve a cabo con éxito.
4. Control
Controlar el proceso es otra de las tareas que debe ejecutar el administrador, esto con el fin de supervisar no solo las tareas como tal para alcanzar los objetivos, sino que además para observar cómo se comportan los equipos de trabajo y hacer las correcciones necesarias o evitar ciertos riesgos.
5. Evaluación constante
La última de las funciones principales es la evaluación, en la cual el administrador se encarga de observar los resultados obtenidos para corroborar el cumplimiento de las metas y objetivos.
Por lo tanto, las correcciones y el análisis no solo se hacen durante el proceso, también al finalizar, lo cual ayudará a que la próxima vez las cosas salgan aún mejor.
Con todas las funciones mencionadas ya te habrás dado cuenta que el administrador de una empresa es quien en definitiva se encargará del cumplimiento de las metas.
Habilidades que debe tener un director ejecutivo
Para que un director ejecutivo pueda cumplir con éxito con todas las funciones mencionadas anteriormente debe tener un perfil el cual no solo integre habilidades técnicas, este también debe incluir habilidades humanas y conceptuales.
Habilidades técnicas: se trata de todos los conocimientos que envuelven sus tareas administrativas de planeación, organización, dirección, control y evaluación.
Habilidades humanas: un director así como cualquier otro profesional no solo tiene que ser un especialista en su área, es clave que además tenga la capacidad de trabajar con personas, ya que de lo contrario no cumplirá con ser un buen líder. Si es un buen líder podrá dirigir y motivar a su equipo de trabajo para que estos cumplan adecuadamente con lo solicitado.
Habilidades conceptuales: este tipo de habilidades lo que buscan es que el administrador pueda entender de mejor manera los problemas que se puedan presentar en el proceso administrativo y así tener la capacidad de resolverlos y prevenirlos en el futuro.
Ahora que conoces las funciones principales que debe desarrollar un director ejecutivo puedes darte cuenta que es una persona muy importante dentro de la organización.
Sin duda alguna, el desempeño de un empleado es una de las llaves que abre las puertas del éxito de una organización. Sin embargo, muchas veces no se le presta la atención requerida por considerarse irrelevante.
Los siguientes cinco puntos representan métodos eficientes para evaluar adecuadamente el desempeño del personal:
Productividad. Se basa en la cantidad de trabajo y actividades que un empleado aporta en una jornada laboral y la calidad del resultado final. Pueden emplearse plantillas de productividad que son llenadas por el supervisor o jefe directo en un plazo de tiempo que haya sido previamente estimado (por ejemplo: diario, semanal o mensual).
Objetivos conseguidos. ¿El empleado cumplió con los objetivos? El rendimiento laboral puede medirse en base a una métrica de cumplimiento de objetivos estipulados con anterioridad; puede ser, por ejemplo, calificado por escrito al final de cada mes.
Formación. El empleado puede ser calificado por los conocimientos que ha adquirido en el transcurso de un lapso específico de tiempo. Contabilizar y tomar nota de las conferencias, los eventos, los congresos o las comidas profesionales a las que asistió, e incluso, pueden llevarse a cabo pequeños tests de conocimientos obtenidos y no olvidar las capacitaciones que se le han impartido.
Responsabilidad y compromiso. La responsabilidad y el compromiso pueden ser medidos por medio de listas de asistencia y retardos, ya sea por escrito, o por medio de checadores digitales que registren la hora exacta de llegada y de salida de cada uno de los empleados.
Eficiencia. La eficiencia es el resultado del cumplimiento constante de los cuatro puntos anteriores. Si el empleado es calificado satisfactoriamente en todas las anteriores, puede darse por hecho que ha maximizado su eficiencia y, por lo tanto, forma una parte muy importante del equipo de trabajo y es un recurso que debe ser conservado.
Existen indicadores que hacen más fácil y accesible la medición de una evaluación, y son las siguientes:
Gráfica de calificaciones. Escala que enumera las características anteriores de menor a mayor o viceversa y les agrega un valor dependiendo del cumplimiento del empleado. Este es el indicador más fácil y más empleado por los supervisores.
Clasificación alterna. Se clasifica a los empleados de “mejor a peor” en cuanto a las características anteriores y se anotan en listas para su posterior análisis.
Distribución forzada. Este indicador es basado en curvas y porcentajes para cada empleado a evaluar.
Verificación de campo. Una persona ajena al equipo de trabajo o un representante de departamento se encarga de solicitar información al supervisor directo para puntuar, con su colaboración, a cada empleado del equipo. El representante prepara un informe del trabajador y lo envía al supervisor para que revise que la información es verídica y posteriormente es enviado al gerente o director responsable.
Escalas conductuales. Son una serie de parámetros que reflejan únicamente la conducta del trabajador, por ejemplo, cuando se analice el método de evaluación de responsabilidad y compromiso, y que suelen llevarse a cabo por medio de preguntas hacia el empleado o por observación directa del supervisor.
Incidente crítico. Cuando el supervisor carga consigo una bitácora y solo observa los incidentes y las conductas laborales (negativas o positivas) del empleado, para, después de aproximadamente seis meses, reunirse con él y discutir su desempeño en base a las anotaciones anteriores.
Elevar la productividad es un proceso no únicamente importante, sino fundamental. Requiere de mucho esfuerzo y trabajo diario, pero vale su peso en oro. Es el cimiento en el cual se construye el éxito (o el fracaso) personal y/o profesional.
A continuación se enumeran 5 puntos importantes para ser más productivo:
Proponer objetivos. ¿Hacia dónde hay que dirigirse? Es la pregunta clave a la hora de plantearse objetivos. Este punto es el primer pilar, puesto que representa el propósito fundamental que se pretende. Si el objetivo se plantea por escrito y se tiene siempre en la mente es más probable que su cumplimiento se logre.
Establecer estrategias y planes de acción. Una vez que el objetivo es claro, es necesario establecer un plan de acción que deberá seguirse al pie de la letra. La productividad está basada en la obtención de resultados concretos en el tiempo y la forma determinados, por ello, una serie de pasos a seguir hará más fácil la tarea y evitará el desperdicio de tiempo.
Administración del tiempo. Se deben organizar las tareas y los recursos en función del tiempo con el que se cuenta. El tiempo es un recurso que no debe ser desperdiciado, el mal uso de este es la fuente principal de improductividad personal y laboral. Cabe destacar que también deben agendarse y especificarse por escrito los plazos requeridos para cada tarea, con la certeza de contar con lo necesario para poder cumplirlos sin demoras ni postergaciones.
Constancia. Se debe ser perseverante en el objetivo, tenerlo siempre en mente. El trabajo constante y la persistencia en las estrategias de acción y tiempo permitirán que se logren los niveles de productividad deseados y que existan, incluso, periodos de descanso y relajación que no interfieran con las actividades y los objetivos.
Cuidar los detalles. Este es el último pilar, pero no por ello menos importante. Cuidar los detalles de cada actividad desde un principio, además de evitar acciones innecesarias, permite ahorrar tiempo en mejoras posteriores. Si bien muchas veces errar es permisible, se debe evitar en la medida de lo posible. Es preferible revisar dos o tres veces que cada detalle se encuentre adecuado a los requerimientos desde un inicio para no desgastar tiempo y esfuerzo después.
¿Qué no hacer?
Como datos importantes, se mencionan tres errores a evitar en el proceso eficaz de la productividad:
Procrastrinar. Esto es, básicamente, perder el tiempo en actividades que no aportan ningún valor. Un ejemplo muy común de procrastinación actual son las redes sociales.
Desánimo. El desánimo puede llevar a la desatención, al estrés y a la pérdida de tiempo. Es muy común que las actividades diarias fomenten este tipo de sentimientos y, de hecho, es normal, pero no se debe permitir que forme parte del día a día.
Dejar de apegarse al plan establecido. Este punto es el más importante porque influye directamente en los dos anteriores. Procrastinar y desanimarse por no cumplir los objetivos pueden ser resultado de no haber seguido paso a paso el plan que se había designado. Por eso, el objetivo debe ser alcanzable y bien estructurado, evitando lugar a errores y a conformismo a la hora de ponerlo de acción.
¿Cómo puede establecerse el pago de comisiones a los empleados?
El pago de comisión o por comisión se otorga principalmente a los empleados que se encargan de vender los productos o servicios de la compañía, puesto que por lo regular, no cuentan con un salario estable mes con mes. Se trata, entonces, de un monto o porcentaje sobre las ventas realizadas. Como se verá a continuación, existen ciertas técnicas o esquemas de pagos por comisión que son utilizadas por las empresas actualmente:
1. Monto fijo. Se ofrece un monto fijo constante, sobre productos. Es decir, el monto fijo de la comisión sería de $250.00 por cada producto vendido independientemente del costo del producto o servicio vendido, ya sea de $2,000.00 o de $10,000.00.2.
2. Tasa fija. El empleador ofrece un porcentaje fijo sin importar el monto total de las ventas realizadas por el vendedor. Es decir, el vendedor recibe (por ejemplo) 5% del monto, así sea una venta de $50,000 como una de $500,000. Es la técnica más sencilla y más común de utilizar por la facilidad de contabilización y porque el vendedor siempre está seguro, si no del monto, sí del porcentaje; eso puede causar cierta motivación a que continúe vendiendo en cantidades y montos mayores.
3. Tasa variable por objetivo de ventas. El porcentaje que se ofrece depende del porcentaje de venta objetivo mensual. Por ejemplo: si el vendedor consigue el objetivo en su totalidad (es decir, 100% del objetivo), recibe una comisión de 10%; si consigue el 50%del objetivo pactado, recibe el 5%. Este esquema de comisión es compleja y puede variar mes con mes dependiendo de los objetivos de venta pactados en reuniones con los vendedores.
4. Tasa variable por escala. Funciona de manera similar al anterior. La diferencia radica en que los porcentajes de comisión aumentan dependiendo de diferentes objetivos, ya no es sólo un único objetivo, sino varios que permiten que la comisión crezca. Como ejemplo: pueden ser dos objetivos de venta mensuales; uno de $75,000.00 con comisión del 2% y otro de $150,000.00 con comisión del 5%.
5. Honorarios mixtos. El vendedor recibe un salario fijo mensual más la técnica de comisión que se haya destinado. Por ejemplo: $3,000.00 de salario fijo mensual más la técnica de comisión por monto fijo.
Para aquellos empleados que reciben un salario fijo por sus labores como: obreros, administrativos, ejecutivos de alto rango o cualquier otro puesto asalariado, también existe la posibilidad de otorgar comisiones, mejor llamados “bonos”, en adición a su sueldo regular mensual y pueden ser por:
Desempeño.
Puntualidad
Asistencia
Productividad
Los bonos son bien conocidos y se emplean en muchas empresas como motivación para el trabajador.